domingo, 7 de agosto de 2011

Frase de la semana

"El colmo de la estupidez es aprender lo que luego hay que olvidar."
Erasmo de Rotterdam (1469 - 1536)
Esta frase escrita en pleno Renacimiento tiene una enorme actualidad ya que uno observa, al menos en la educación médica, cómo se enseñan contenidos de bajísima prevalencia (Lupus, Miastenia, Metabolopatías estrambóticas, mecanismos moleculares, bah contenidos de "zoológico", el famoso "vení a ver esto que nunca lo vas a ver" ?????????).
Estos contenidos ocupan un valiosísimo lugar en nuestros escasísimos recursos cognitivos, distraen la atención de enfermedades que sí tienen una alta prevalencia y que deberían quedar tatuados a fuego en nuestra memoria y, finalmente, de todos modos, en la primer micción post examen, terminan en el mingitorio o en el inodoro ya que los estudiamos "amnésicamente" de memoria y los regurgitamos en forma automática y sin nigún procesamiento cognitivo.
Cariños. Robi

1 comentario:

  1. Estimado Robi. Acabo de conocerte a través de uno de tus videos,que me sugirió mi hijo Gonzalo, profesor de Historia y Director de Liceo.Me presento: me llamo Ibsen Rama, tengo 74 pirulos, y soy médico(Laboratorio Clínico,
    Hematología)jubilado, vivo en Florida, Uruguay, a 100 Km de Montevideo. A la vejez, el aburrimiento y la estrechez económica, me puse a preparar a gurises de 6º año liceal para examen de Biología.
    Y acá es donde aparece el nexo con esta entrada tuya. Me acabo de enterar que deben aprender cómo hace la bomba de sodio-potasio para excitar la neurona; cómo la troponina le corre el prepucio de tropomiosina a la miosina delgada para que la miosina gorda se empale a la actina (esto probablemente esté todo mal, porque yo tampoco lo pude aprender). Y claro, yo ya me había hecho la pregunta: ¿es necesario esto, llegar así a la ultrahojarasca de la masturbación mental? Suponiendo que lo aprendan, ¿qué pasa si después le preguntás dónde está ubicado el bíceps braquial y el tipo no lo sabe? El problema (mi problema)es deslindar hasta dónde tengo razón o bien estoy pasando a la categoría de viejo choto reaccionario. Por suerte, encontrar tus conceptos arrojó un mucho de luz, parece que todavía lo mantengo a distancia al alemán.
    Por último, esto me hizo acordar a una costumbre que teníamos con mi compañero de estudios: nos aprendíamos bien alguna letra chiquita (lo que llamábamos la hojarasca de la pajita) y mientras esperábamos para rendir examen nos poníamos a repasarla en voz alta. Cuando rendimos Patología Médica II (así era en nuestro plan, hace 40 años; aprender (¿?) tooooda la Patología Médica te llevaba un año y pico) nos aprendimos el kuru, una patología exclusiva de los nativos de Nueva Guinea causada por la consanguineidad,- si la habremos aprendido que todavía me acuerdo - y empezamos a repasarla cerca de otro compañero que se paseaba como león enjaulado estrujando su neocórtex con vistas al examen. En determinado momento se paró al lado nuestro y nos dijo: miren che, yo del kuru no sé un carajo, pero me aprendí bien el infarto de miocardio, porque si me lo preguntan y no lo sé, lo que sí sé es que me van a sacar del kuru hasta el próximo período.
    Disculpá la lata, pero es todo un placer descubrir a alguien con tus ideas y con la forma genial de trasmitirlas. Te seguiré de cerca. Un abrazo.
    PD: tengo un blog: sebinamar.iresblog@blogspot.com Si, cosa que dudo mucho, tenés algún momento totalmente al cuete, me gustaría lo visitaras. Son todos divagues pretendidamente humorísticos, algunos relacionados con la Medicina, como Mi Aventura por Oniria, Segundas Partes... Saludos cordiales.

    ResponderEliminar